Barnum (Come follow the band!)
"El mayor espectáculo del mundo" (The greatest show on earth, Cecil B. DeMille, 1952) es una de las primeras películas que recuerdo haber visto en mi vida. No puedo acordarme de mucho -tendría 6 o 7 años- pero creo que la vi en un viejo cine de mi pueblo, en pantalla gigante, en "technicolor". Los colores, eso es lo que me viene a la memoria. Y la mano de mi padre agarrándome con fuerza al salir de aquel cine. Con tales precedentes no debe ser muy fácil mantener el nivel de felicidad el resto de tu vida... Pero ahí andamos.
Aún era demasiado joven para saber nada sobre el empresario que montó ese enorme circo en la vida real, el loco que entregó su vida entera a hacer soñar al mundo.
Phineas Taylor Barnum (1810-1891) tenía fama de embaucador y mujeriego, y seguro que se la ganó a pulso, pero también llegó a ser un afamado hombre de negocios, escritor, filántropo, editor, político ocasional y claro, showman. Además de todo esto, Barnum fue el inventor del circo como hoy lo entendemos.
There is a sucker born ev´ry minute... dice la canción con la que empieza el musical al que hoy rindo mi ovación. A cada momento nace un tonto -pocas veces se ha dicho una verdad tan grande encima de un escenario-, y con tal premisa no sería tan difícil montar un espectáculo a base de "humbugs" (tonterías, patrañas, disparates) que atrajeran a las legiones se suckers de la América de entonces.
Barnum hizo todo un arte del razzle-dazzle, de cómo deslumbrar al espectador y metérselo en el bolsillo sin mucho esfuerzo. La mujer más vieja del mundo (niñera de Abraham Lincoln, por cierto), el elefante gigante Yumbo, el hombre más pequeño del planeta... el arte de vender humo, pero eso sí, a todo color.
Su esposa lo quería trabajando como oficinista, pero él se negó a pasar por la vida vestido de gris, sin pena, sin gloria y sin aplausos. El mundo es de los valientes, y de los estafadores, que es lo que muchos le consideraban. "El mayor estafador del mundo".
Varios productores flirtearon con la idea de llevar la vida de este pionero al teatro. Pero finalmente fueron el libretista Mark Brumble, el letrista Michael Stewart, el director Joe Layton, y el más importante -al menos para el que escribe-, el compositor Cy Coleman los que lograron levantar el telón del St. James Theatre de Broadway en abril de 1980.
Desde sus problemas económicos hasta sus peleas con su adorada -y abnegada- esposa Chairy, desde la construcción del Museo del Circo hasta el invento del circo ambulante en ferrocarril, desde su ocasional entrada en política batallando por los derechos de los negros hasta su affaire con la soprano Jenny Lind, desde la repentina muerte de Chairy hasta su fusión con el circo de Bailey... todo está en el show. Pero contado y cantado a través de números musicales encadenados a ritmo de espectáculo circense. Acróbatas, payasos y funambulistas son a la vez actores, cantantes y bailarines que narran con agilidad y energía las aventuras y desventuras de este loco maravilloso. Y encabezando el cartel un prodigioso Jim Dale junto a Glenn Close en uno de sus primeros papeles en Broadway, como P.T. Barnum y señora. ¿Alguien da más?
Al año siguiente Michael Crawford y Deborah Grant lo estrenaron en Londres superando el éxito de Nueva York, y extrañamente no habían vuelto a reponerlo hasta que este verano ha sido la máxima atracción del Festival de Chichester, un pueblecito adorable al sur de Inglaterra. Christopher Fitzgerald (Young Frankenstein, Finian´s Rainbow) y Tamsin Carrol (Ragtime) han protagonizado esta espléndida producción del Mr. Producer por excelencia Sir Cameron Mackintosh para deleite de todos los que hemos tenido la dicha de estar bajo la carpa del magnífico Theatre in the park que han montado en la ciudad. Un auténtico lujo, independientemente de lo que las críticas hayan dicho de este show impresionante y colorista. A las pruebas me remito.
Barnum es un musical con corazón, con nervio. Una historia de amor y desamor, de arrepentimiento y perdón, de sueños y decepciones, mágico y real como la vida misma, dulce y amargo a partes iguales. Las canciones del maestro Coleman (Sweet Charity, City of Angels, The Will Rogers Follies, The Life) te llevan desde la euforia del salto mortal hasta la melancolía del payaso acabado en una espiral de melodías inolvidables y exultantes. Y qué bien han envejecido, y qué bien cuentan lo que tienen que contar.
En la carpa de ese pueblecito de Inglaterra aplaudimos y gritamos, lo confieso, y nos levantamos del asiento para agradecer a la compañía las dos horas y media que nos habían regalado. Y salimos con una sonrisa de oreja a oreja, la misma que llevarían en sus caras todos los suckers embaucados por los humbugs del gran maestro del engaño. ¿Acaso no es eso el mundo del espectáculo?
Adoro este musical desde que cayó en mis manos -el cd primero y luego el vídeo- hace como quince años, cuando aún no tenía ni idea de quién era ese tal Barnum. Pero sí sabía quien era Michael Crawford y con eso tenía suficiente. El genuíno Pantom no podía haber hecho algo que no mereciera la pena.
ResponderEliminarCuando este verano supe que lo reponían en el festival de Chichester, producido por Mackintosh y protagonizado por Fitzgerald me subieron las pulsaciones, la máxima se me puso de mínima y no descansé hasta que no tuve en mis manos las mejores butacas que pude conseguir. Por mí y por mis compañeros! Y ninguno nos arrepentimos, por eso os lo traigo hoy.
Comenzamos con el tráiler de la producción del festival. Buena pinta ¿no? Ojalá dé el salto al West End, desde luego lo merece más que muchas funciones que llevan años en cartel. Y no señalo. Christopher Fitgerald y Tamsin Carroll lo dan todo, y la compañía es un lujo total.
A continuación la producción de Londres del 81, con un Michael Crawford superb y Deborah Grant como Chairy. Dos números cruciales en el show, The colors of my life (uno de los temas románticos) y One brick at a time (sobre la construcción del Museo Barnum). Mira que lo he visto veces, pues aún me sigo quedando con la boquita abierta.
Y finalmente Un, dos, tres responda otra vez. Cuando la televisión era televisión y los recortes eran los pedacitos de obleas de las monjas. Emilio Aragón presentando con toda la compañía el Barnum que se hizo en Madrid gracias a la iniciativa y esfuerzo de nuestro Phineas particular, Jaime Azpilicueta.Corría 1984, y por alguno que conozco que estaba allí, el Teatro Monumental se convirtió en un verdadero circo de música y color. Eran otros tiempos…
Q no parezca peloteo, pero he flipado con este post, Barnum es un musical que me ha encantado siempre (aunque prefiero a Jim Dale, porque Michel Crawford siempre ma ha dado un poco de grima) y lo que cuentas y como lo cuentas, qué bueno tío!
ResponderEliminarOjalá me hubiera podido escapar para verlo, porque el video tiene una pinta bestial, pero con un viaje a England al año ya voy que me mato, mi economía no da para más.
Enhorabuena y gracias por este rato
Ah, soy Santi, sorry.
ResponderEliminarLo de Emilio Aragon sin comentarios, qué valor hay que tener jejeje
Muchas gracias Santi! Y si parece peloteo que lo parezca, pero yo sé que lo dices de verdad.
EliminarMichael Crawford tiene un puntito cursilón, lo sé, pero en el vídeo esta genial ¿no? Y el número de la cuerda floja lo borda el tío. Fitzgerald también lo hizo muy bien, elevando la emoción del momento al máximo.
Y bueno, lo del spanish barnum... pues no sé, yo no lo he visto, pero un amigo me cuenta que estaba muy bien montado. El vídeo que pongo es una actuación del 1,2,3... demasiado pa lo que s ¿no? Era solo por la curiosidad.
Un musical sobre las supertacañonas YA!!!
Bueno, es el descubrimiento del verano en la incursión londinense. Me quedé sin palabras cuando salí de la carpa del green del festival de teatro de Chichester, sobretodo por la rapidez con la que habían pasado dos horas y media cuando pensaba que eran diez minutos, y todo gracias a la magia de Barnum.
ResponderEliminarEl espectáculo es fantástico, con unos intérpretes estupendos y un cuerpo de baile espectacular. Movimientos, saltos, acrobacias, escaladas... todo aquello que esperamos cuando vamos al maravilloso mundo del circo, pero además cantando y manteniendo una coreografía. Las voces insuperables tanto del derecho como del revés, literalmente eso del revés, ya que en más de una ocasión estaban los bailarines colgando de una pierna hacia abajo, pero manteniendo el tono sin el más mínimo desajuste.
La carpa en la que se desarrolló el festival era grandiosa; la veíamos desde la terraza de la cafetería mientras dábamos cuenta de un reconfortante sandwich, y parecía la nave espacial de Cocoon, aquela película en la que los ancianos recuperaban la juventud en el interior de una piscina. Ese era el ambiente que llenaba los asientos de la sesión matinal; todavía siento como absorbían nuestra juventud durante la representación ¿verdad compañeros?
Bromas a parte, el musical fue un verdadero descubrimiento para este que escribe, y todo gracias al blogger que nos empujó a la aventura de Chichester. Thanks dear.
jajajaja la nave de Cocoon, no se me puede ocurrir mejor símil!! Lo que no sé es por donde salían rejuvenecidos, porque ¿no serían los acróbatas transformados no?
EliminarEl público d las matinées es todo un espectáculo en sí, andadores, muletas, tobilleras y tubulares diversas, chandals de colorines insólitos, y mucha, mucha sandalia ortopédica! Lo fuerte es que con el estruendo en que acababan algunos números musicales algunos continuaran con su siesta sin inmutarse. Prodigioso!
Aparte de esto, que le pone un toque de ternura a todo el paquete, es verdad lo que dice mi amigo Fernando, lo que pudimos disfrutar esta función!
Un auténtico descubrimiento, no solo el Barnum sino el Chichester Festival al que regresaremos sin duda alguna!!
Bieeen, estaba deseando de leer algo sobre lo que vuestros ojos han visto este verano en la tournée inglesa. Ahora es que estoy escuchado la rueda de prensa de Zarzuela a ver si el Rey se coge la baja, pero en cuanto termine de escuchar bobadas me pongo los videos.
ResponderEliminarQué verdad es que a cada minuto nace un tonto, y algunos se quedan así para siempre. Un beso
Este en particular te habría encantado Isa!! Mira los vídeos y compara lo que hacen en la great britain y lo que hacemos por aquí!!
EliminarAl rey no le tienen que dar la baja, le tienen que dar la "azoluta" de una vez por todas, y que se dedique a ir a matinés con su andador y su chandalito, como los viejos más afortunados del mundo, los que viven en Chichester!
¡Pero qué agradable sorpresa cuando he abierto el blog y he descubierto tu regreso! Qué bien que ya tengamos otra vez una pagina de calidad que consultar y videos buenísimos que ver cada semana. El cambio de look me encanta Angel y la fila de los aspirantes a la selección del corus es preciosa de verdad.
ResponderEliminarAlgo más ¡qué foto tan bonita tienes en esa puerta de artistas! Tú eres un artista sin duda¡
Un abrazo y que no pare la música nunca, que nos alegra mucho estos tiempos de cirsis
Wellcome back amiga mía!! Ya te estaba extrañando yo por aquí... Y es que aunque no nos conozcamos (a esto hay que poner remedio algún día), te echo de menos si no me das señales de haberme leído y visto ( a los vídeos me refiero).
EliminarGracias por los piropos, me voy a poner colorado!! Pero es verdad que todos llevamos un artista dentro, y cuando estamos tan cerca de las estrellas nos da la cara!!
Muchas gracias from the bottom of my heart!
Un abrazo y que no pare la música!
Y como siempre me olvido de firmar, soy tu amiga Ana de Córdoba, y decirte también que no conocía el musical Barnum y que tiene tan buena pinta...
ResponderEliminarPues me alegro mucho de habértelo presentado, jejeje
EliminarHombre, sin quererle quitar mérito al esfuerzo de Emilio Aragón... El primer video es un sueño. Un auténtico espectáculo estético y musical... No conocía este musical pero tiene una pintaza estupenda. Ya me imagino lo que lo disfrutaríais en directo. Lo del Un, dos, tres... hombre pues... en fin... un aterrizaje forzoso del sueño anterior. Sin comentarios.
ResponderEliminarEs lo que dices, un espectáculo de una estética cuidada al máximo. La producción original (que está en el segundo vídeo) es incomparable por lo que significa, por los actores etc. pero en esta última han echado los restos con las coreografías, el vestuario (los cuerpassos!!), los decorados -simples y eficaces- la orquestación y todo lo demás. Un Barnum tratado con mucho mimo.
EliminarY es que la historia y las canciones de este show no se merecen menos. No dejo de ponerme una y otra vez el CD, come follow the baaaand...
Un beso guapa, y a ver si nos vemos asap!
Mis felicitaciones para ti y para el Dr Pitanguy de Utrera por ese recauchutado y lifting tan sutil y elegante, que tan bien os ha quedado (aunque ni falta que te hacía). En serio, me gusta mucho y no quería dejar de decírtelo.
ResponderEliminarDespués de leerte, dan ganas de ver Barnum hasta con Emilio Aragón y Rita Irasema (¿Cómo, qué ella no estaba en la spanish versión? Pues no me lo explico…..).
Desgraciadamente, nunca he coincidido en la Big Apple con este musical en cartel y aunque siempre he tenido una inexplicable aversión por el mundo del circo, saber que es uno de tus musicales preferidos, ya es garantía suficiente para saber que me encantaría.
Por eso, por lo que relatas, después de ver los videos tan certeramente seleccionados, y por supuesto por la compaña, me habría encantado verlo en Chichester (Fernando, me encanta el símil de Cocoon porque me lo he imaginado perfectamente). Ahora, que todo esa incursión a ese festival, me huele a avanzadilla, a inspección del terreno para cuando tengamos (dentro de muuuuchas décadas, hablo por mí) que ir preparando un retiro dorado (no digas que no , si hasta llevabais al “baldaito” para darle mas realismo a la cosa!!!!). Ahora, chandalitos de colorines insólitos y sandalitas ortopédicas never of the neverases, please !!!
Bueno, querido, que queremos más, queremos “rayar baldosa” con todas las crónicas enteritas de vuestro intensísimo paso por el West y claro está, seguir disfrutando con todo lo que tengas a bien regalarnos en esta nueva andadura de Stage door para la que te deseo lo mejor. (Break several legs!!!)
Abraços e beijinhos!!!!
Paula
Hombre menos mal!!!! Que ya estaba a punto de mandarte un enlace que pusiera "come follow the band joé!!"
EliminarA mí tampoco me ha llamado mucho el mundo del circo desde nunca, la verdad. Siempre me ha dado mucha pena, mucho mieo, siempre me ha olido un poquito a sudor seco, a lona recalentá y a mojones de poni, pero esto es otra cosa.
Barnum, igual que Pippin que ahora renace con fuerza, es un show que toma el mundillo circense como punto de partida, como pretexto para hablar de la lucha de un hombre por hacer de su vida algo especial, algo grande. Y la historia y su ambientación dan tanto de sí para montar un musicalazo como este...
Aunque no veamos a la Irasema (lanzando perfume) en el vídeo, me consta que formó parte de la producción. Y aunque aún no se haya pronunciado -qué trabajito les cuesta a ustedes poné unas letras- mi amigo Luis estuvo allí y repitió, y me cuenta que se quedó maravillado. Y yo me lo creo, pero lo de Chichester ha sido algo grande de verdad.
Me alegro de que te guste la nueva imagen de esta vieja de tres años que es el blog, ahora que lo hemos estirado vamos a por nosotros, que ya vamos tarde!!!
Besinhos miles
Disgustazo con lo de la Roberta!!
Bueno, bueno...ya estoy aquí!!! Estrenando ordenador gracias a mi Barnum particular que siempre hace magia...muchas gracias queridísimo Juanito y qué bonito te ha quedado el blog. ¡Me encanta!
ResponderEliminarA mí ya no me queda nada por decir salvo que suscribo todo lo que han dicho mis compis de viaje. Sencillamente fue una tarde maravillosa, un espectáculo soberbio y cuánta energía...la que le faltaba a los abueletes je, je...aunque entre el cojito y yo con los pies a punto de una embolia no desentonábamos mucho.
Michael Crawford puede que sea un poco sensiblón y almibarado pero a mí me transmite mucha emoción siempre. Me encantó esta versión.
Paula...¿tan lejos nos vamos a jubilar? Chichester está bien para el veranito y ver algún musical pero en invierno tiene que ser la muerte a pellizcos!!!
¡¡¡Que ya estamos de vuelta...comienza la temporada!!!
Besotes miles.
Conso
Ahora sí que se tiene que cuadrar el cuerpo de camareros del Harmonia Garden!! Después de una prolongada ausencia Dolly García (alias La Conso) vuelve a cruzar la puerta de este humildísimo blog y a bajar las escaleras como solo Ella sabe (si es que no cae rodando, vamos). Y suena la melodía de Herman y todos se congratulan por verla regresar por fin a su cita de los jueves, tras haber solventado diversos problemas informáticos, virus mortales, troyanos asesinos y demás dramas cibernéticos.
EliminarWellcome darling!
Hello Conso, well hellooo Consooo...
Qué buenos ratos hemos pasado este verano juntos en la gran ciudad, y cómo hemos disfrutado de cada cosa que hemos visto, cada una en su estilo. Pero este Barnum ha sido bien especial ¿no?
¿Cuándo nos veremos en otra? Igual ya mismo, a ver si el boleto del Caserío nos da para la multipropiedad en donde tú sabes!!
Un beso y no te vayas más!!!
Desde luego que como no quiten la ENVIDIA de la lista de los 7 pecados capitales, este que les habla teme que va a pasarse en el Infierno toda la eterna eternidad post-mortem. No me van a dejar ni la posibilidad del Purgatorio. Y todo por el mero hecho de leer cada quince días este wonderful blog. Esto tendría solución si fuera a confesarme del pecado capital, pero no me pone mucho eso de arrodillarme delante de un señor vestido con faldones negros (ni siquiera en mis más recónditos y prohibidos morbos ocultos). Y sí, envidia, mucha envidia es la que me das cada vez que nos presentas tan maravillosos espectáculos que has tenido la suerte de ver en directo. Porque este Barnung en la carpa Cocoon tiene muy buena pinta. Yo tengo el Barnung de Mr. Crawford en DVD, y a pesar de su toque 80's y no entenderlo en su totalidad (mi english no da para mucho), me encanta, porque a mí (al contrario de lo que algunos han expresado anteriormente) me ha encantado (y encanta) el mundo del circo. Y me gusta el circo antiguo, el de olor a caca de elefante, con incómodas gradas de madera, y trajes llenos de remiendos y costurones. No ese circo light para pijos parvenues que es el Circo del Sol. Mi circo es el circo de Trapecio, de Dumbo, de Jumbo, de El mayor espectáculo del Mundo, etc. Y este musical es un claro ejemplo de esa magia circense que cada vez es más difícil de encontrar. Yo, para no perder esos recuerdos de infancia, cada vez que un circo "de los de toda la vida" llega a mi ciudad, saco las entradas para alguna sesión vespertina, y recuperar, durante unas dos horas, el maravilloso tiempo perdido.
ResponderEliminarEs que a mi amigo Ismael le gusta el espectáculo desde sus tuétanos!
EliminarY me pasa como a ti, mucho de lo que me apasiona ahora lo hace porque ya me fascinó cuando pequeño, por no sé qué razón o razones pero de alguna manera todo está trenzado con los recuerdos y las sensaciones de entonces. Llámalo magdalena, cortadillo o gitanito de Proust, pero así lo siento. Y es verdad que hay mucho, pero que mucho romanticismo en el circo, pero en el de antes, no tanto en los megashows que recorren el mundo en modo franquicia, que son otra cosa.
Es curioso pero para haber dado tanto de sí en la vida real, el circo no se ha prodigado demasiado por el teatro musical ¿verdad? ¿O no? Refrescadme la memoria si me equivoco.
Bueno, ahora tenemos uno de los grandes en NY con Pippin. ¿Pero hasta cuándo? ¿Nos dará tiempo de sentarnos a que Patina Miller nos pregunte cómo están ustedeeees?
Un abrazo querido, y ojalá te pueda dar envidia (de la sanota, eso sí) por muchos años!!
Por cierto, por alguna razón, en mi ordenador no me sale la foto de portada de esta entrada. ¿Sólo me ocurre a mí?
ResponderEliminar¿Qué no se ve? Ohhh, con lo bonita que es!! En los que lo he mirado (ordenador de sobremesa, mac, ipad, móvil... (xdxd) sale perfectamente.
EliminarNo sé que habrá pasado, eso seguro que nos lo resuelve mi colega!
Holaaa!
ResponderEliminarAquí estoy yo! El que faltaba!
Pues , bueno, GRACIAS amigo Angel, que me ha gustado mucho,
mucho, mucho la entrada.
Lo del circo de acuerdo, no he sido muy cirquero, pero es que Barnum, es “otra cosa”. Y lo digo como tu sabes con conocimiento de causa. Con todo lo malo que se pueda pensar de “Milikito”, yo puedo dar fe, ya que vi el musical en 5 ocasiones; una de ellas en Valencia (estaba haciendo la mili y pedí una tarde libre para ir a verlo, y fui invitado por el Sr. Emilio Aragón, si Miliqui (E.P.D.), llegué, pregunté por él y cuando le vi le dije: “Hola soy de Madrid, os he visto allí unas cuantas veces, estoy haciendo la mili y me gustaría ver el espectáculo de nuevo”, el me contesto: “Claro que si, nuestro palco es tuyo, y allí vi el espectáculo, un palco, para mi solo”, a que es genial! No es por nada pero es que el Sr. Aragón, padre, era genial), al hijo, “Milikito” solo le conocí de “hola y adios”, y cada uno puede pensar de él lo que quiera, pero os digo que la función era TREMENDA, un calco de la inglesa, sin escatimar muchos gastos. Nene Morales, era Chairy (Después trabajé con ella y me conton algunas anecdotas), y estaba brillante. El elenco cumplía a
la perfección su cometido, seguro que el tiempo, esto fue hace siglos!, me hace perder un poco la perspectiva, pero
se que la vi con otros amigos asiduos musicaleros y pensaban como yo. UN GRAN ESPECTÁCULO.
Al verlo en el plato de TV, pierde, os lo aseguro.
Me imagino que la nueva versión es superb, como ellos dicen por England, el video es genial, y sobre todo lo que se ve del prota, muy Pippin (el nuevo).
Gracias.
Sigue haciéndonos soñar, darling.
Luis.
Las cosas que le han pasado a mi amigo Luis en las puertas y dentro de los teatros... La de gente a la que ha conocido, las colas que ha hecho, los sorteos de entradas en que ha participado y las charlas que se he echado desde los taquilleros y las estrellas... Pero al final el tío estaba sentado en el palco enfrente de The Prince of Humbug!
EliminarYa sabía que te iba a gustar esta entrada, porque tiene relación con un trocito de tu historia... Valencia, la mili... por dios qué viejos somos!!! jajajaja
No dudo de que esta producción fuera excelente, no olvidemos las cosas tan interesantes y arriesgadas que ha hecho Azpilicueta en nuestro país, especialmente en unos momentos en los que no había ninguna cultura del teatro musical por aquí. Bueno, la verdad es que dudo que ahora la haya... pero bueno, ese es otro tema. Ay... quien hubiera tenido edad para largarse a la capital entonces a ver este Barnum, o Evita, o Jesucristo, o... Kiss me Kate con Marujita Díaz!!! jajajaja
Un abrazo gigante amigo mío!
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Jajaja, me habéis llamao de tó en esta entrada, Dr. Pitanguy, Barnum particular, baldaíto, cojito. Gracias por los halagos y ya sabes Consolación que lo hago con muuucho agrado. Me encantó Chichester y me encantó este musical. Sabía de la existencia de Barnum porque me tocó estudiarlo en la carrera y me fascinó la historia de este empresario, heredero de los freak shows de la Inglaterra victoriana (El hombre elefante), que unía a su espectáculo circense exhibiciones de rarezas humanas:siameses, supuestas sirenas con cabeza de mono momificadas, amputados, enanos..., todo políticamente muuuy correcto; seguramente sea esa la razón de que no se haga referencia a nada de esto en todo el musical, a pesar de ser una parte esencial de sus señas de identidad como showman. El símil de coocon no puede ser más acertado, Fernando, para describir el ambiente que nos rodeaba en Chichester. El espectáculo fue un subidón continuo de 2 horas y media que se hicieron cortísimas; Christopher FitzGerald es un todo terreno y derrocha energía por los cuatro costados, los números de Black and White y One brick at a time y, por supuesto, Come follow the band, que no puedes dejar de tararear al salir del teatro. Si siguen ofreciendo musicales de este nivel, no tendremos más remedio que volver a Chichester, y espero que sea antes de jubilarnos, que a partir de cierta edad ya no está uno pa ná. Enhorabuena, darling.
ResponderEliminarTu darling te toma la palabra y cada agosto nos damos un garbeo por tan lindo pueblo. Ay... si yo lo sé, que hay muuucho mundo que ver por ahí, pero es que la cabra y el monte ya se sabe...
EliminarQué suerte hacer una carrera en la que se estudie Barnum! ¿No hay ninguna en la que se de Gypsy? ¿Funny girl? ¿Ether Merman? jajajaja
Pitanguy, Barnum, baldaíto de mis entretelas... ya sabes que toda esta 4ª temporada is for you, así que a ver si participamos una mijita antes, que casi no llegas!!!!