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jueves, 22 de diciembre de 2011

Standing ovation



Oliver! (where is love?)

Una de las cosas buenas que siempre ha tenido la navidad -al menos para quien escribe- las ha proporcionado la literatura y el cine. Tal vez la mezcla del turrón, los polvorones, el anís y el almíbar de los cuentos, películas y villancicos hayan llegado a empacharnos muchas veces. Pero renegar de ellos es un poco como renegar de nosotros mismos, de nuestro pasado y de una tradición que puede resultar impuesta, pero que está intensamente ligada a los recuerdos y a los seres más queridos. Al fin y al cabo, ¿no estamos siempre buscando donde está -o donde estaba- el amor?
Igual que en la cuaresma no fallaban Los Diez Mandamientos, antes de las vacaciones de invierno nadie nos libraba de tragarnos Oliver! en el colegio. Y gracias a eso tuve la suerte de ver muchas veces esta película en pantalla grande, como hay que verla. Si alguien me hubiera dicho entonces que llegaría a ver la obra original en la que está basada, en la misma ciudad en la que se desarrolla y en el mismo barrio en el que sucede la mayor parte de la acción... de verdad no le hubiera creído.
Si My Fair Lady es una prolongación de Covent Garden, Oliver! es como un trozo de la City. Sí, Londres no es un lugar, es el mundo que inventaron los autores de Peter Pan o Mary Poppins para embaucarnos a todos los que tenemos flojo el músculo de la fantasía.
Londres, 1838, primera edición de Oliver Twist, segunda novela de Charles John Huffman Dickens subtitulada The Parish Boy´s Progress, emulando las series ilustradas del pintor Hogarth (A Rake´s Progress) en las que se reflejaba una Inglaterra en el umbral del mundo contemporáneo pero con toda la rémora de un oscuro pasado. La Revolución Industrial estaba cambiando la fisonomía de una ciudad única, llenando sus calles de sucios obreros, tenderos, lavanderas, libreros, prostitutas, ratas y rateros. Y ollín, mucho ollín, el de las miles de chimeneas que daban un poco de calor para combatir el frío de la pobreza y la injusticia.
¿Una novela picaresca? tal vez lejos de su contexto, pero nos cuenta algo muy similar. Un niño que vaga por un mundo hostil buscando algo que comer y alguien que le quiera. Un pobre chaval que se atreve a pedir a la vida un poco más. Please sir, I want some more.
Los pícaros le esperan en la gran ciudad. Artful Dodger, el colega. Fagin, el protector. Nancy, el amor, Y Bill Sakes, el asesino. En esta insólita aventura lo único que, desgraciadamente, no nos podemos creer es el final. En aquellos tiempos el que nacía pobre, moría pobre. Y el que había sido abandonado, difícilmente sería reencontrado y menos por el propietario de un soleado balcón frente a Regent´s Park.
La popularidad de este libro aumentó sobremanera cuando en el año 1960 se estrenó un musical basado en la novela. Antes ya había sido llevada al cine por David Lean (1948) en una espléndida película en blanco y negro. Pero la llegada a los escenarios redescubrió definitivamente este clásico de la literatura.
Lionel Bart compuso la música y las letras de la que es posiblemente una de las mejores partituras de un musical. Este autor londinense que había escrito temas para cantantes de moda (Cliff Richard o Tommy Steele) y para algunas películas (From Russia with Love), jamás llegó a conocer un éxito en su carrera como el de Oliver! De hecho, sus otros musicales son títulos que, a pesar de ser de gran calidad, fueron completamente olvidados (Blitz, Maggie May o La Strada, sobre la película de Fellini). Debe ser duro lograr un triunfo de tal dimensión a los treinta años y no poder igualarlo nunca más.
La película que todos conocemos no solo mantuvo sino que superó con creces la aceptación del musical. En 1968 Carol Reed dirigió una de las más espectaculares versiones teatrales de la historia del cine. Los decorados, la puesta en escena, la fotografía, coreografía y, naturalmente, el acertadísimo reparto, hicieron de esta cinta el clásico que hoy es. Resulta difícil imaginar otro Fagin que no sea Ron Moody (que ya hizo el personaje en el musical) o un villano Bill Sakes distinto a Oliver Reed. Pero desde luego cuesta pensar en un Oliver sin el inocente y angelical rostro de Mark Lester. Al igual que la del autor de la música, la carrera del protagonista tampoco remontó después de este hito. Ambos fueron condenados a vivir de Oliver para siempre.
Desde pequeño, Cameron Mackintosh quedó atrapado por la historia (y la música) que envolvía a este personaje. Y no paró hasta producir el montaje más extravagante y más espectacular de cuantos se han hecho. En 2009 se reestrenó el que para muchos es el Oliver definitivo, una cuidada versión para la que se eligió un teatro que no podía ser más apropiado. El Theatre Royal, Drury Lane, un viejo y aparatoso edificio de ladrillo visto en el mismo corazón de Covent Garden. Uno no sabía si tenía que agarrar su cartera al salir de allí, o si acabaría en una persecución nocturna entre las nieblas del London Bridge. Por momentos así merece la pena pagar una entrada en libras esterlinas. Pero en realidad no hace falta gastar tanto dinero para dejarse llevar por este maravilloso cuento dickensiano.
Es diciembre, 1972. Estamos en el cine de los Salesianos, o en la salita de casa con toda la familia reunida alrededor de una bandeja de pestiños (y oliendo mucho a la alhucema del brasero de cisco), comienza la película que una vez más nos llevará a un Londres donde de nuevo nos perderemos vagando por sus oscuras y frías calles. Pero no tenemos miedo porque ya sabemos que al final los buenos volverán a ganar, la avaricia y la crueldad tendrán su justo merecido, y el amor -que ya averiguamos donde estaba- triunfará una vez más.
Pónganse cómodos, dejen volar la imaginación y...consider yourself at home!











25 comentarios:

  1. ¿Cómo iba a dejar huérfanos -como Oliver- a mis seguidores en unos días tan señalados?
    Así que ahí va, una entrada muy a propósito dedicada a todos vosotros con mis mejores deseos para el año que está apunto de llegar. Pero se la dedicaré muy especialmente a alguien que ayer obró un pequeño milagro, el de rescatarme de las garras de la melancolía. Además, Isa llevaba meses pidiéndome una entrada sobre este musical. Va por ti, amiga.

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  2. Los vídeos de esta semana son sencillamente divinos. Antes de esperar a que lo digáis lo diré yo.
    El primero es un trailer de la espectacular producción de Mackintosh que tuvimos la suerte de ver hace un par de años. En las butacas siguientes Paula, Asun y Juan, disfrutando como niños.
    El segundo es un programa de la BBC del 2008 en el que vemos a un chorro de niños magníficos -y superprofesionales- cantando food glorious food y demás, para recaudar fondos para las aldeas infantiles.
    Y mi tema favorito del musical, la sentida balada As long as he needs me. La canta Judy en su programa, The Judy Garland Show. Una versión honda y desgarrada, como su propia vida. ¿Y el caldaíto de ella?

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  3. Bueno, bueno, Oliver, qué maravilla. Porque tengo que irme a cenar a la calle y aún no tengo el smoking planchado, que si no te escribía un comentario larguísimo. Lo dejo pendiente para mañana. Ah, y ya tienes contestación en mi blog, que Don Jose María será don José María, pero don Ángel es mucho don Ángel.
    Y felices navidades a todos los seguidores de este wonderful blog.

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  4. Ay...ese viaje a Londres navideño que yo me perdí!!! Yo nunca he visto OLiver en el teatro pero si tengo la película y me he leído el libro de Dickens y me parece espectacular...tanto lo uno como lo otro.
    Los videos están muy bien, se ve que es un supermontaje...¿Dónde encuentran niños tan lindos y que cantan y actúan así de bien? Una divinidad como dice nuestro querido maestro de ceremonias.
    Con la genial Judy lo único que te queda es que se te caiga la baba...no podría haber una reencarnación y volviera a aparecer? Qué mujer!!! Cómo se puede decir la canción de esa manera y con ese torrente de voz!! La pobre está hecha una alcayata y de peinaíto fatal...pero qué delicia!!!
    WONDERFUL!!!

    Felices navidades para todos...los que escriben y los que sólo leen o entran de vez en cuando.

    Conso

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  5. Agradecida, emocionada.
    Para mí Dickens va tan unido a la Navidad como Estepa o los Reyes Magos.
    Adoro este musical, la semana pasada os confesaba que no me pongo los tacones sin canturrear mentalmente never fully dressed, hoy confieso que cuando estoy a régimen y me lo salto, en mi mente suenan las notas de food, glorious food.
    Nosotos estuvimos en Londres cuando ponían Oliver, pero sólo había entradas con limited view. ¿no hacía Rowan Atkinson de Fagin?
    Londres, es verdad lo que dices, que no existe. Es la ciudad que más debe a sus artistas, porque en Roma o París la belleza te asalta por las esquinas, pero en Londres hay que buscarla en la memoria: es la ciudad donde Eliza Dolittle vende flores, donde van las Bennet a buscar novio, donde los dibujos de tiza se convierten en parques por donde Mary Poppins pasea, donde un niño que no quiere crecer entra por la ventana de la buhardilla, donde Robert Graves vuelve de la I Guerra Mundial, donde aparece un país de nieve detrás de los abrigos colgados en un armario, donde sale un tren del andén nueve y tres cuartos o donde te visitan de noche los fantasmas de otras navidades. Muchos hemos crecido en esta ciudad inexistente, y a ella volvemos gracias a obras como ésta y a amigos como tú.

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  6. Conso, lo de los niños es alucinante. Cuando comienza ese número inicial del food... y empiezan salir criaturas por todas partes y cantando de esa manera... es que se me cayeron dos lagrimones de emoción... Y es que el Cameron Mackintosh echó los restos con esta producción. Seguro que la verás algún día porque la tendrán que reponer más veces. Y ya sabes que tenemos un viaje pendiente a la ciudad de la neblina...

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  7. Maravolloso y qué ambientación!! me encanta, todos los años les pongo la peli a mis pupils.
    M.Chelo

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  8. ¡Cómo se nota que estamos en Navidad! ¡Qué calidad de entrada (algo que viene siendo norma de la casa) y, por qué no decirlo también, qué nivelón de comentarios (bravo por Isabel y Conso). Prometía en mi comentario anterior una larga reflexión sobre este musical pero he caido en la cuenta de que en su día (lejos aún la O, pues voy por la C) tendré que dedicarle una entrada en mi blog de cine musical, así que me reservo el rollito para ese momento.
    Sólo añadir dos cosas:
    Primera: como ocurre con Cabaret, la versión fílmica supera, o al menos está a la altura (va en opiniones, y no vamos a discutir matices), la versión teatral de la que procede.
    Segunda: después de sentir a lo largo de este blog una (por qué no llamar a las cosas por su nombre) cochina envidia cada vez que alguno decía "Yo vi el montaje de NY, yo estuve cuando la hicieron en el año tal, yo presencié en directo tal, etc.", esta vez soy yo el que puede decir que ha visto el Oliver definitivo del que se habla en la entrada, el año pasado en Londres. Y disfruté como nunca de la ocasión. Ea, ¡ qué ganas tenía de poder decirlo!

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  9. Isabelita!! Que estoy a punto de borrar mi texto de entrada y pegar el tuyo. Qué bonito recorrido por el London literario!! Me encanta.
    Rowan Atkinson (Mr. Bean) estuvo haciendo el Fagin casi un año para reflotar la producción, pero los tremendos costes de montaje etc. obligaron a cancelar el show hasta nueva orden. Por cierto dicen que lo hacía realmente bien.

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  10. Ismael, me alegro de que este sí lo vieras. Merece la pena ¿eh? Sin embargo en Nueva York esta producción estuvo muy poco tiempo, y es que nunca se sabe como acertar. Pero en cualquier caso estoy contigo en que, aunque el musical sea una pasada, esta película es realmente in-superable.

    Sigue con la tradición de Oliver en el cole Chelo!! Que no se pierda!!
    Un abrazo y felices fiestas

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  11. Hola, Ángel. Suscribo todo lo dicho por todos. Solo una cosa...ese montaje de 2009 con Rowan Atkinson ¿no es la misma versión del que hizo Sam Mendes diez años antes con Jonathan Pryce? De hecho, yo no ví este último porque estaba seguro de que era el mismo que ví años antes y me dejo sin palabras. Who will buy?
    Fernando Mendoza.

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  12. En efecto es la misma producción que dirigió Sam Mendes con Pryce haciendo un Fagin definitivo. El CD que se editó es precisamente ese.
    Un abrazo y felices fiestas!

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  13. Que maravilla de película, ayer la volví a ver una vez mas. Pero de verdad me has emocionado con lo que cuentas sobre este musical y sus autores.
    Espero que el 2012 nos traigas mucos más capítulos como este.
    Un abrazo y muchas felicidades para todos los fans del musical
    Ana

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  14. Flipante... Y que bien escribes jodido! :-)FELICES FIESTAS!!!!!
    Esther

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  15. Gracias, muy bueno, muy interesante, he disfrutado mucho. Que tengas unos días felices como los de tu infacia. Un abrazo.
    Juan R.

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  16. Lo de la Garlan no se puede soportar. Ella es posiblemente la mas grande del mundillo del espectaculo, con su hija Liza, pero todavia me gusta y me emociona ella mas. Qué manera de estar en el esenario, de expresar y volverse loca y volvernos locos a los fans.
    VIva la Judy y viva tu blog que es tremendo
    Y felices navidades
    dani

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  17. Bueno después del nivelazo de comentarios que ya hay, creo que sobran las palabras. Yo conocía la película, que la tengo en casa y la veo bastante, aunque nunca es suficiente, pero no conocía nada del musical. Me ha dejado sin palabras, no se si por la época, la calidad del montaje o por ambas cosas; creo que por ambas cosas.

    De los vídeos, los que ya me conocéis lo sabréis sin necesidad de decir nada, me quedo sin duda con Judy Garland. Estropeada no lo siguiente, la piel como un pergamino ajado, tres pelos que parecen una frondosa melena, los destellos del traje que te dejan ciego a la primera de cambio, chica y consumida como un gorrión, pero que torrente de voz, como se come la orquesta, que sentimiento en la interpretación... me ha resultado maravilloso.

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  18. Ana, Esther, Juan, Dani... felicidades y gracias por vuestros comentarios. El año que viene mucho más, si no os canso, claro. Más música, más letras, más baile, más historias y más emoción. Que mientras estemos entretenidos en esto no andamos golfeando por la calle ¿no? jajaja!
    Besos

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  19. Judy, Judy, Judy! Ya sabía yo que si ponía un video de la one and only se iba a formar. Si es que esta mujer necesita un blog para ella sola. Desde que era la inocente Dorothy buscando Kansas en la tierra de Oz, hasta la decadencia de los últimos años ahogados en píldoras y alcohol, siempre fue sencillamente única.
    Precisamente de esa etapa final trata el musical "Más allá del arcoiris" que viene al Lope de Vega con una estupenda -y valiente- Natalia Dicenta. Creo que es en Marzo, así que vamos comprando entradas Fernando.
    Y hablando de entradas, ve preparando la cartera del sultán de Brunei!!

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  20. A lo de ir comprando entradas me apunto, llamadme.
    A lo de Judy, creo que el video se comenta solo. Qué cantaora más buena se perdió con que naciera en América en vez de en Utrera.

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  21. Contaremos contigo, claro!
    Fernanda, Bernarda y Judy. Pues no harían mal trío, los wiskazos que se iban a meter entre las tres!!!
    Un beso a ti y a todos mis seguidores antes de cruzar el Atlántico en busca de nueva inspiración. Si en el fondo lo hago por vosotros...

    FELIZ 2012!!

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  22. hi, happy new year angel, how do you love ny??
    Great hughs
    Miss you
    Melissa

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  23. Hi Melissa!! Happy new year to you too!! I really loved the city, as always did.
    The streets, the people, the cultural life, the food, THE THEATRE!!! In a simple word, AMAZING!!
    Now I feel ready to come back ASAP
    Take care
    Ángel

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  24. Ay Angel, si ya lo dijo D. Miguel de Cervantes Oh envidia raíz de infinitos males y carcoma de las virtudes!!! Que razón tenía…..
    Bueno, pues ahora que ya he vuelto a poder respirar con normalidad (ja,ja)y aunque con muuuucho retraso te diré que esta entrada me ha encantado as usual, querido. No quiero pensar como va a ser el siguiente post(aunque lo espero con ansia inusitada)con tantísima información interesante y emocionante como has acumulado en los últimos 10 días. Además queremos una crónica a la altura de lo que ya nos tienes acostumbrados, con detalles de todo lo visto y vivido y a la que no le falte un perejil eh?
    ¿Qué decir de Oliver el musical que tuvimos la suerte de compartir juntos? Me encantó, me emocionó y me hizo volver a sentir en algunos momentos el sobrecogimiento y la fascinación que sentí de pequeña cuando vi la película en varias ocasiones. La producción, la música, el teatro y sobre todo la compañía (la vuestra), nos hicieron pasar una noche inolvidable. Es verdad que el número Glorious food especialmente, de lagrimones.
    Y creo que hay dos aspectos muy importantes que contribuyeron a hacerlo todo mas especial (sin quitarle un ápice de merito a la magnífica producción) una que era Navidad y otra que era Londres y al salir del teatro, era todo tan “Dickeniano”…..el frío, la neblina, los edificios, la City….el escenario perfecto para lo que acabábamos de ver.
    By the way, feliz año para todos y que los “Amaya” nos dejen seguir disfrutando en el 2012 y por mucho tiempo de nuestro Angel y de este Stage Door.
    Besos.

    Paula

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  25. Verde que te quiero verdeee... pero al final vas a tener la má de suerte porque te van a llamar para hacer la bruja de Wicked.
    Si es que se te echa de menos!! En el Gran Pero por supuesto, pero en este blog también, y lo sabes. Así que don´t ever leave us!!!
    Mañana publico nueva entrada y la intención es poneros los dientes muuu largos. Como ya dijo Cervantes: "esto hay que pasarlo Josefa"

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